OPINIÓN

Latinos en Arizona quieren un líder que comprenda lo que está en juego en la lucha por el cambio climático

Por años, Arizona ha sufrido con olas de calor y sequía extremos, pero 2020 se ha convertido en el año en donde la crisis climática, y sus consecuencias, son más evidentes que nunca.

Antonieta Cádiz
Portavoz para Climate Power 2020
Las temperaturas en Mexicali han superado los 40 grados centígrados con humedad considerable.

Implacable, es la única palabra que describe adecuadamente el calor que agobia continuamente a Arizona. A lo largo del verano y otoño hemos visto el impacto del calor sin precedentes en las comunidades, que al mismo tiempo están batallando con una pandemia de salud. 

Y con cada advertencia que llega sobre temperaturas de tres dígitos, sabemos que también hay consecuencias para los cientos de miles de hispanos en el estado; personas que ponen sus vidas en riesgo al trabajar bajo el sol o que han debido preparase para complicaciones de salud debido al calor y a los incendios.

El clima extremo no es ajeno a los residentes de Arizona. Por años, el estado ha sufrido con olas de calor y sequía extremos, pero 2020 se ha convertido en el año en donde la crisis climática, y sus consecuencias, son más evidentes que nunca.

Este mes, Phoenix alcanzó un nuevo récord con 143 días con temperaturas por encima de los 100 grados Fahrenheit en un año. Actualmente, más de 200,000 residentes de Arizona son vulnerables al calor extremo, especialmente los latinos que viven en el centro de la ciudad de Phoenix y Tucson.  Cada año, las enfermedades acentuadas por el calor son responsables de cerca de 3,000 visitas a la sala de emergencia en Arizona. En 2019 hubo 283 muertes relacionadas con el calor en el estado. 

Esta es una realidad dolorosa y que impacta a los latinos más que a cualquier otro grupo en el estado. La frecuencia con la que los latinos trabajan al aire libre, ya sea en la agricultura, el manejo de ganado o la construcción, se traduce en que tienen tres veces más probabilidades de morir en el trabajo por causas relacionadas con el calor que los blancos no hispanos. 

En combinación con una sequía devastadora, el calor extremo ha hecho que Arizona sea más vulnerable a los incendios forestales. Tan sólo este año Arizona ha perdido más de 700.000 acres a merced del fuego. Esto es más de lo que se quemó en 2018 y 2019 combinado. Para el 2050, Arizona sufrirá 115 días con calor extremo y alto potencial de incendios, posicionándolo sólo detrás de California. 

Los latinos en Arizona quieren acción climática. Encuesta tras encuesta muestran lo importante que es tener líderes electos dispuestos a priorizar la lucha contra el cambio climático. De acuerdo a una Encuesta de Latino Decisions de 2020 en Arizona, el 73% de los encuestados dijeron que era muy importante o extremadamente importante que el próximo presidente y el nuevo Congreso tomaran los pasos necesarios para aprobar una legislación que combatiera de manera agresiva la crisis climática, con el 54% de los votantes diciendo que es extremadamente importante.

Los latinos en Arizona comprenden que nos encontramos en un punto donde no hay marcha atrás para el cambio climático, y necesitamos que nuestros líderes comprendan esa realidad y que trabajen para acabar con el impacto desproporcionado que la crisis climática tiene en sus comunidades y en general para las personas de color. 

Es por esto que es sumamente importante que los latinos en Arizona y por todo el país, usen su voto en estas elecciones para inclinarse por acción sobre el cambio climático. Sin un movimiento liderado por aquellos que están viviendo con la crisis climática en estos momentos, no podemos aspirar a un cambio real y duradero. 

Antonieta Cádiz es portavoz para Climate Power 2020

Climate Power 2020 es un proyecto gestionado independiente creado por el Center for American Progress Action Fund, la League of Conservation Voters y el Sierra Club.